EL RENACER DE VALERIA ( CAPÍTULO X)

Imagen noticia

enero 29, 2025

 

                                       Capítulo x

 

                 “La Jet Set”

                                  Parte II

 

 

La conexión con ambas fue increíble, casi palpaba la humedad entre sus piernas. Cler y Mary desprendían fogosidad y elegancia, eran como dos piezas de frambuesas, delicadas pero un toque de acidez que estaba deseosa de probar. La verdad es que era una experiencia totalmente diferente, el mero hecho de montármelo con dos hermanas, hacía que llamasen mucho más la atención.

La noche fue  avanzando y entre risas y anécdotas varias íbamos creando más conexión, tanto es así, que, en unos de los recovecos de la mansión, Cler que sin duda era la más ingeniosa y la que desprendía ese toque de picardía, se acercó y con sus manos comenzó a acariciarme el pelo de una manera casi disimulada, ese tipo de detalles despiertan en mi algo indescriptible y super placentero, para que os hagáis una pequeña idea, era la misma sensación que percibimos cuando nos sentimos atraídos por una persona, te lo follas por primera vez y a su vez te enamoras, pues esa serotonina que segrega tu cuerpo cuando estas en la primera fase de una relación. Pues creo que eso es lo que sentimos las personas swingers cuando vamos a follar con otras personas, ya sean de tu mismo sexo o intercambio. Ya sé que la gran mayoría de vosotros soñáis con un trio con tu pareja y otra mujer, suele ser lo típico para iniciarse, pero al final la gran mayoría terminamos manteniendo un intercambio con otra pareja. En otro capítulo os contaré mi experiencia con una mujer de pago y mi marido. Se que soy un poco rara, de hecho, me atrevería a decir que me pone ver a mi marido follar con otras mujeres, os puedo decir que esto me hace tener una seguridad y autoestima increíble, pero esto da para un par de capítulos, que sin duda os mostraré más adelante.

- ¡ahí lo dejo! –

Sin más rodeos, sigo con esta historia que arde en deseo. Cler, cada vez más atrevida, dejó atrás las caricias tímidas y se entregó a susurros sucios y cargados de perversión, justo entre mi cuello y el lóbulo de mi oreja. Su aliento caliente me estremecía, sus palabras obscenas me hacían palpitar entre las piernas. Me hablaba de todo lo que quería hacerme, de cómo pensaba abrirme poco a poco hasta dejarme temblando, suplicando por más. Mi piel se erizaba con cada roce de sus labios, con cada promesa húmeda y sucia que dejaba escapar entre jadeos. Ya no había vuelta atrás. Solo quería que me tomaran sin tregua, que nuestros cuerpos chocaran sin piedad, que la noche se convirtiera en un frenesí donde solo existieran sus lengua, sus dedos y mi deseo derramándose entre sus manos."

No podía esperar más, necesitaba catar ese par de “MUSAS” que el destino puso en mi camino, así que entre coqueteos y miradas un tanto indiscretas, les dije si podíamos retirarnos a alguna estancia un tanto más privada y acogedora.

Cler y Mary no dudaron ni un segundo, conocían cada rincón de la casa como la palma de su mano. De este modo nos dirigimos a la sala donde predominaban las altas esferas, llevando a cabo todos los entresijos de sus oscuros negocios.

La sala era grande, pero a su vez acogedora, perfecta para llevar a cabo nuestra depravada e idílica perversión más absoluta.

Siendo sincera, la primera en romper el hielo fui yo, comencé a palpar esas delicadas curvas que tanto habían llamado mi atención. Ellas en seguida, comenzaron a besarme, la verdad que verme entre ambas como si de un sándwich se tratara, hacia que mi excitación se elevara cada vez más.

Para mí era algo totalmente desconocido el hecho de montármelo con dos hermanas idénticas, pero la verdad es que me movía como pez en el agua, ellas, sin embargo, podía notar que no era la primera vez que compartían un coño. Después me enteré que ambas mantenían una relación poliamorosa con el jefe de mi marido. No sé, pero…

- ¿a vosotros no os resulta, atractivo y excitante el hecho de mantener una relación puramente sexual con dos hermanas gemelas? –

Eso es justamente lo que despertó a mí. Dicho esto, continúo contando y así profundizar más en el escenario.

Ambas eran bastante apasionadas, pero si tengo que elegir, diría que Mary era la que más me encendía. Sus pechos rondaban apenas la talla ochenta y cinco, algo que su hermana decidió modificar con cirugía para aumentarlos. Personalmente, siempre he sentido una atracción especial por las tetas pequeñas; los considero más atractivos, elegantes y sugerentes. Tal vez porque, en mi caso, siempre he tenido un busto voluptuoso, algo que a mi marido le encanta.

Por otro lado, las curvas y el culo redondo como si de un melocotón se tratase de Cler eran perfectos, juntas eran el pack completo y eso que no había llegado al escondite de su entrepierna.

Comencé a quitarle el vestido a Mari, tenía la necesidad de estrujar y besar cada ápice de sus tetas, tengo que confesaros que siento gran predilección y hasta me a atrever a decir fetichismo por besar, lamer y jugar con unas buenas tetas. Considero que unos pechos bien puestos siempre dan mucho juego. Mientras jugaba y succionaba las tetas de Mari, podía notar como Cler besaba mi cuello a la vez que me agarraba de pelo para tenerme sometida y así ella, la cual gozaba teniéndome totalmente dominada y a la que le encantaba follar duramente, iba levantando mi vestido para poder echar a un lado la puntilla de mis braguitas ya totalmente mojadas. Yo seguía besando a Cler y Mari estaba super concentrada en su labor, quería comer mi coño totalmente rasurado, no sé por qué, pero esa noche en la ducha de mi casa había decidido tener mis partes preparadas para la acción. Considero que un buen coño depilado y cuidado es super importante, por ello el mío parecía que nunca hubiese catado una buena polla.

Cler tenía ganas de echarse a la boca un buen coño, y el mío estaba preparado para la acción la verdad que yo soy un poco especial a la hora de catar un clítoris, pero yo sabía que estos no me iban a defraudar.

- ¿Vosotros como empezáis a comer una almeja? –

-"¿Sois de los que disfrutan recorriendo cada rincón con la lengua, tomándose su tiempo, o preferís succionar con intensidad? ¿Quizá os excita más ir deslizando los dedos, uno a uno, hasta transformarlo en un molusco completamente abierto, con labios gruesos y ardientes, ansioso por más?"-

A mí me gusta preparar la zona e ir saboreándola poco a poco. Creo que las buenas cosas hay que saborearlas muy cuidadosamente…

Continuará…

Solo deciros que el capítulo tres de este relato viene cargado de sensualidad y mucho, mucho sexo…

www.luxxuapp.com